Son quizas una de las razones más importantes por las cual alguien puede desahogarse y tratar de vivir en paz, en armonía. Hace sentir que uno de verdad no se sienta "solo". El compartir las cargas adecuadamente sobre otro semejante a veces resulta para bien. Las historias, los comentarios, los sarcasmos, la música, los gustos, las locuras, las risas, el alcohol, el juego, la curiosidad, todo se entremezcla para transformar la noche o el día, aquel momento de convivencia amical. Se agradece mucho. Todo el rato mientras pensaba esto escuchaba esta canción tiene una composición melódica especial. (Keane - The frog prince)
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